Después de COVID Se Dona Plasma
28 días después de los síntomas.
Después de haber superado el COVID y mi aislamiento, decidí donar mi plasma de manera altruista, sin ninguna intención más que tomarle ventaja a este virus. Mi mamá estaba nerviosa porque ella donó para otra causa hace 15 años y recordaba que era molesto, incómodo y tardado:
Te acuestan y luego te ponen una aguja en cada brazo porque por un lado te sacan la sangre y por el otro te la regresan. Literalmente sientes cómo te baila la sangre en el cuerpo.
Hoy es más sencillo. Después de haber tomado mis muestras y comunicarme que era candidata para donar, lo único que pasó fue que, me acostaron y me pusieron una aguja y listo. Con mi brazo izquierdo elegía un capítulo de mi podcast favorito y mi brazo derecho permanecía inmóvil. Y eso fue todo. No sentí que nada se moviera adentro de mí, no se me durmió el brazo, nada. Al final me dieron un certificado, una pulsera y una comida completa 🤤.
No duele. No hay manera de volverte a contagiar, principalmente porque nadie lo está haciendo, solo se tiene contacto con profesionales.
https://www.nl.gob.mx/campanas/si-tuviste-covid-19-dona-plasma-y-salva-vidas
Cuando COVID te convierte en amenaza, aunque como asintomáticos no se sienta así; la donación de plasma te regresa la dignidad, te vuelve esperanza, te da la sensación que esos 15 días fueron tu preparación para salvar a otros. Como si el virus se convirtiera en lo que hay que vivir para lograr algo más grande que uno mismo.
Con la donación de plasma se tiene una sensación de triunfo; por 60 minutos el personal de salud te da la bienvenida a su mundo; comprendes porqué continuan haciendo lo que hacen. Son increíbles. Mientras el aislamiento es soledad, angustia e incertidumbre; la donación de plasma son ellos y ellas abrazándote, aplaudiéndote, diciéndote la verdad y mostrándote un brillo hermoso.
COVID se llevó a mi tía Yola, impidió a la familia juntarse y propagó el miedo entre mis seres queridos pero gracias a la donación plasma, me gusta pensar que, pude evitar que se repitiera. Que si conocí al pinche virus ese, tomé eso como ventaja para derrotarlo.
Somos más los asintomáticos, somos más lo que podemos unirnos al gran gran esfuerzo del personal de la salud y ayudar.
Por favor, donen plasma.
Aunque el enemigo sea numeroso, si no conoce tu situación militar, puedes presionarle a que se ocupe de sus propios preparativos y que no tenga respiro para fraguar sus planes de combate en tu contra. -Chia Ling en El Arte de la Guerra.